A pesar de que su novia estaba tumbada en el sofá y echándose la siesta, no pudo evitar acercarse y meterle mano. De hecho tras jugar debajo de la manta, pudo acariciar su culito hasta terminar quitándole las bragas y teniéndolo a tiro. Lo lubricó bien y al final, empezó a darle por detrás con mucha delicadeza mientras ella se iba desperezando, hasta sentir como se lo rellenaba de lefa en un creampie anal.
Categorias: Anal
05:36