Tras ir a casa de su abuela para hacerle compañía, estos jovencitos vieron como la señora se ponía a beber cerveza y terminaba borracha perdida. No le hicieron mucho caso, hasta que la vieja echó mano de sus pollas en el sofá. No podían creerse lo que estaba pasando, pero le siguieron la corriente y al final, la desnudaron y le echaron un buen polvo entre los dos. Al día siguiente ella no se acordaba de nada, pero se marcó un trío casero bestial y sus nietos lo disfrutaron a tope.
Categorias: Incestos
06:01