Tras decidir ir a su casa, esta morena andaba algo nerviosa, ya que jamás había estado con un mulato y tenía algo de miedo por lo que podía pasar. Y es que estaba claro que acabarían teniendo sexo e imaginaba que tendría un buen rabo entre las piernas… algo que efectivamente así era. Pero al final se dejó llevar y se le quitaron los nervios, para disfrutar de su pedazo de polla y gemir de lo lindo mientras penetraba su coño como un animal, acabando el polvo interracial con una buena lefada en su boca.
Categorias: Interracial
06:07